Daniela Tarazona, compañera en novela, envió este post de Edgar A. Mora, co-becario del Fonca, donde explica muy bien dos cosas: cómo son los encuentros de Jóvenes Creadores y el creciente desconcierto desde la literatura hacia el arte contemporáneo.
Lo más curioso es que la bomba auditiva a la que se refiere ha sido explotada: esta crónica neurótica da cuenta de ello. En esta otra RPG da cuenta de un recorrido por la ciudad intervenida por artistas.
Los dos autores terminan con su propia propuesta de pieza de arte contemporáneo y en el contexto ambas parecen igual de válidas. Parece que mientras tantos artistas piensan que son «otro rollo», la mayoría comienza a darse cuenta que son puro rollo.