Geney Beltrán ensaya sobre la escritura en el número de julio de Nexos. Es una de esas reflexiones de veras buenas que caracterizan su pluma. Acá va un fragmento:

«Asume, sin defenderse, que la escritura es un incendio íntimo del que no es posible salir intacto: no es el suyo un oficio y sólo un oficio. Es un proceso intuitivo de introspección que –merced a la liberación de una sensibilidad abierta a la expresión de las emociones, las memorias, los sueños, las pasiones, las obsesiones– debe ser llevado al límite de las posibilidades expresivas para propiciar en el lector –ésa es la apuesta, el riesgo, la ambición– una desazón vital en que se pongan en juicio su sentido ético, su pensamiento y su postura ante el mundo. La apuesta, el riesgo, la ambición consiste en cambiar el mundo, cambiando a través de la escritura la idea que el lector tiene del mundo.»

Como ya estamos a fin de mes pronto el texto deberá estar disponible completo en el sitio de la revista. No se lo pierdan.